07 de novembre, 2007

Érase una vez un niño sin culpa

Algún día, Javi, tus ideas se pondrán en fila. Se alinearán tus pensamientos y, por fin, serás un hombre.
Los golpes, lesiones, y maltratos que te regalas se convertirán en un amor muy grande, en algo más allá de lo que puedas explicar, una sensación que te conducirá a ser feliz. Más de lo que nunca hubieses imaginado. Más de lo que cualquier persona te haya podido prometer. Más de lo que nunca, a tus once años, habrías pensado.
Algún día, Javi, la ayuda caerá en tus manos y la podrás acoger.
Mientras tanto, día a día, voy a cederte mi tiempo para que termines con mi paciencia y abuses de mí.


3 comentaris:

Luis Eustáquio Soares ha dit...

holá, este su texto es fuerte siendo frágil, pues es hecho de aprendizajes de vulnerabilidades.
te invito a conocer mi blog.
b
luis

Dauri Batisti ha dit...

Olá,
Obrigado por ter visitado meu blog,
essapalavra.

É verdade que não é fácil transformar em palavras essas coisas que se dão dentro da gente. Mas, de tentativa em tentativa algo acontece, e aparece uma palavra menos mentirosa.

Quanto ao português, você escreveu muito bem. Só dois pequenos erros: Estan ao invés do correto estão e disculpa ao invés de desculpa.

vovê é linda.
Parabéns

Volte sempre ao blog.

E viva Barcelona!

Dauri Batisti

Dauri Batisti ha dit...

quis dizer VOCÊ É LINDA